jueves, 30 de mayo de 2013

DESPUNTA EL DIA

DESPUNTA EL DIA



Despunta el día, las estrellas van cerrando sus ojos, tienen que descansar para poder

 iluminar la noche. La Luna, se hace un poco la remolona, no le apetece irse todavía,

 quiere esperar para poder ver a su amado, el Sol, al que tan poco ve, los dos están

 condenados a perseguirse sin poderse abrazar
.
Por el horizonte, encima de las montañas, se empieza a vislumbrar un rayo de luz, al

 principio es de un color rojo intenso, para irse dulcificando, y pasar por un amarillo

 intenso, a un resplandor que no se puede mirar de frente.

En ese momento, la Luna se mete por el lado contrario sin apenas decir adiós, esta

 noche la volveré a ver un poquito más pequeña, está en menguante, dentro de unos

días, dejaré de verla, y eso me produce desasosiego, ¡¡¡está tan oscura la noche sin

 ella!!!

Conforme va avanzando el día, todo se pone en movimiento, los barquitos de pesca,

regresan a puerto, los mercantes inician su acercamiento, para descargar las mil y una

 cosas que transportan, empiezan los coches con sus dueños dentro que van a trabajar,

 los niños de Colegio, aparecen con sus caritas de sueño envueltos en sus bufandas,

 parecen enanitos borrachos, van dando tumbos medio dormidos, sus papas no están

mejores que ellos.

Todo comienza, incluidos los ruidos, yo también me desperezo y con un café en la

 mano, salgo de mi terraza para empezar mi actividad diaria.




Pilar

Buenas noches

El extres dificulta tu paz interior, afecta a tu salud, tu felicidad y tu vida.
Para evitarlo, renuncia a querer lograr objetivos de manera acelerada y forzosa. Aprende a utilizar el tiempo en forma ordenada.
Evita tensionarte por querer hacer varias cosas a la vez.

Buenas noches a todos, hasta mañana

martes, 28 de mayo de 2013

CAMINANDO SOBRE LAS NUBES

CAMINANDO SOBRE LAS NUBES


Subí encima de las nubes y esperaba encontrarme con un terreno blando y suave, y cuál sería mi sorpresa, al encontrarme un suelo pedregoso, de cantos rodados.
Pensé que todo sería blanco, impoluto, pero no, había zonas oscuras y tenebrosas, me dio un poco de miedo pero me dije a mi misma, que ya que había tenido la valentía de subir hasta allí, no podía rajarme ahora.
Tuve que calzarme, para no dañar mis pies con las piedras, pues no sabía cuán largo sería el camino que tenía que recorrer, tampoco sabía que es lo que me encontraría en él o al final, si es que había final, todo era un misterio.
Miré a mí alrededor y vi un camino que se iniciaba justo delante de mí y comencé mi andadura. Era un camino extraño, sin vegetación aunque había unas protuberancias redondas que al darles el sol, parecía que tenían luz propia.
En realidad no sabía que es lo que iba buscando, cualquier cosa me servía, aunque me resultaba un poco tedioso el camino, siempre igual.
De repente, apareció un ser extraño, parecía un gato de angora, era blanco, pero cuando me fui acercando, descubrí que al lado de los ojos, tenía como dos rayas abultadas que le daba un aspecto siniestro. No sabía si se me lanzaría y me quedé inmóvil, el corazón me latía con fuerza, pues no sabía cuál sería mi reacción, de momento no cometí ningún alarde ¡por si acaso!.
Al cabo de un rato, el dichoso animal, se aburrió de dar vuelta a mí alrededor y se fue mirándome despectivamente, ni que decir tiene, que yo respiré, ante la ausencia del dichoso animal.
Seguí caminando despacio, ya no las tenía todas conmigo, cuando de repente, el camino se fue iluminando de una luz dorada, era precioso el espectáculo, no sabía a qué se debía pero mirando hacia el horizonte, vi como empezaba a salir el sol y a eso se debía el color dorado de las nubes, ese color, se fue convirtiendo en rojo, era impresionante verse metida en él, y al final acabó en un color brillante y cegador, el Sol estaba ya en su apogeo.
Decidí dar la vuelta pues el calor era cada vez más asfixiante y no quería quemarme, en vista de lo cual, deshice el camino andado y salí de la nube, no me digáis cómo, no lo sé, solo sé que me encontré de vuelta a mi cama de donde había salido.
Ni que decir tiene, que no le conté a nadie mi aventura, supongo que hubiesen pensado de mi que estaba un poco loca, pero no me importa, fue precioso aunque a lo mejor solo fue en mi imaginación.