domingo, 14 de febrero de 2010
EL VIENTO
EL VIENTO
Llegó el viento con su sonido bronco,
las nubes corren despavoridas sin rumbo fijo,
se retuercen, formando mil formas diferentes,
llegan hasta el horizonte y desaparecen.
En la mar, el viento embravecido, levanta olas
que al estallar sobre las rocas,
se descomponen en millones de minúsculas gotas,
que al ser transpasadas por los rayos del sol,
que apenas se deja ver entre las nubes,
forman un precioso Arco Iris,
que parece se clava en dos extremos alejados de la Tierra.
Los barcos, parecen cáscaras de nuez a merced de las olas,
los marineros echan mano de sus chubasqueros
para protegerse del baño inesperado que se avecina.
no se pueden marchar, han echado los aparejos
y dentro de un rato deben recoger el fruto
que la mar les ha entregado.
Cuando aparece este viento, la gente está nerviosa,
dicen que les afecta mucho para este tipo de enfermedades,
muy generalizadas entre la gente de la mar,
supongo que debido a la vida tan dura que llevan.
Menos mal que queda poco
para que se nos eche la noche,
se calme el viento y barcos y personas
vuelvan a la normalidad.
Pilar
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Querida Pilar que dos relatos tan bellos, este del viento y el anterior de la montaña. Me ha encantado leerlos. Ver tus fotos siempre es una gozada.
ResponderEliminarAbrazos con cariño, karla
El texto muy con la mar y sus gentes, pero la imagen es realmente preciosa.
ResponderEliminarGracias a las dos por vuestros comentarios.
ResponderEliminarUn abrazo
Pilar