ECLIPSE DE LUNA
Me estás mirando de frente
Con la cara enfurruñada
¿Qué te pasa dulce Luna
Para estar tan enfadada?
Hoy te estuve yo esperando
A que estuvieras aquí,
Y tu cara no me gusto
No era la que yo conocí.
Me dirás mi dulce Luna
Lo que te pasó
¿A que sí?
Ha aparecido un planeta
Que mi cara oscureció
Y mi semblante se ha mostrado
Como nunca me gustó
Pilar
Pues vaya con esta la luna, que no nos pasa ni una.
ResponderEliminarLas caras se llenan de arrugas y con ellas apechugas.
Un beso
Jorge.
Gracias Jorge, veo que te has convertido en poeta jaja.
ResponderEliminarUn abrazo
Pilar
Bueno, pero a pesar de no mostrar su mejor cara, la Luna siempre tendrá ese hechizo especial que tanto nos atrae, verdad que sí?
ResponderEliminarQue hasta la Luna tiene derechoa a pone mala cara de cuando en cuando...jaja...
Un abrao muy fuerte, Pilar!
Núria
No será de la tristeza que tiene la Luna por no poder ver al sol? Leí una vez una leyenda que decía que cuando hay un eclipse es cuando pueden verse, y que mejor observarles durante unos pocos minutos, para que puedan disfrutar de su intimidad, tan pocas veces conseguida :-)
ResponderEliminarUn beso!
Pilar
Nuria, tienes razón, tambien la Luna tiene derecho a poner mala cara de vez en cuando.
ResponderEliminarUn beso
Pilar
Pilar, me has dado una alegría al verte por aqui.
ResponderEliminarEfectivamente, pero no siempre es así, tengo una foto puesta en el blog, tomada a las 6 de la tarde en la que el Sol ilumina a la Luna que está entre dos nubes negras.
Un beso
Pilar